jueves, 17 de mayo de 2007

DISCURSO PRESIDENCIAL

En el discurso presidencial ante el Congreso Nacional en Pleno, la Presidenta Bachelet debería comenzar hablando con la verdad, explicando a la ciudadanía las cosas tal cual son, revelando los verdaderos propósitos del gobierno. Como asimismo, debería pedir perdón por la continua e indignante violación a los derechos humanos de los santiaguinos que día a día deben padecer por el Transantiago y también a las regiones por la postergación. La presidenta , además, debería también dejar de lado la obcecación y reconocer los errores de su gestión, planificación y administración, comprometiéndose a prevenir la improvisación, a no actuar solo a la medida de las contingencias del momento, a estudiar y evaluar los problemas reales del país y su gente, a invertir bien los recursos y no guardarlos debajo del colchón pensando en usarlos meses antes de la próxima elección, a castigar la falta de probidad y frenar la corrupción fiscal, a terminar con el cuoteo partidista, las soluciones parches y las comisiones que de nada sirven a la hora de tomar decisiones, y a liderar un país que necesita urgentemente avanzar sin estatizar ni aumentar el gasto fiscal.